Los factores de crecimiento, modo con el que vulgarmente se define en nuestro ámbito al uso de Plasma Rico en Plaquetas, está teniendo un eficaz resultado en el tratamiento de la artrosis de grandes articulaciones, con una mejora significativa en el dolor y funcionalidad de los pacientes en muchos de los estudios publicados al respecto.

El PRP se obtiene a partir de la propia sangre del paciente y se procesa para concentrar las plaquetas y los factores de crecimiento que se cree que tienen propiedades reparadoras y regenerativas en los tejidos.


El tratamiento de la artrosis de rodilla con Plasma Rico en Plaquetas (PRP) consiste en la inyección del PRP en la articulación de la rodilla pudiendo ayudar a reducir el dolor y la inflamación, mejorar la función de la rodilla, estimular la regeneración del cartílago y retrasar o incluso evitar la necesidad de una cirugía.

Aunque la evidencia sobre la eficacia del tratamiento de la artrosis de rodilla mediante PRP es aún limitada y variable, muchos estudios sugieren que puede proporcionar beneficio en el alivio del dolor y la mejora de la función articular.

Varias revisiones sistemáticas y metaanálisis han encontrado que las inyecciones de PRP pueden mejorar el dolor y la función de la rodilla en comparación con las inyecciones de placebo o de ácido hialurónico, un tratamiento estándar para la artrosis de rodilla. Al respecto, en la página de la web de Sendagrup «Terapia Regenerativa» hacemos referencia a diferentes estudios publicados sobre el uso de factores de crecimiento en el tratamiento de diferentes patologías ligadas a la traumatología y entre ellos, algunos estudios comparativos del efecto de los factores de crecimiento en comparación con otras terapias como el uso del ácido hialurónico.


Sí que en ocasiones podemos ver resultados discordantes en los resultados del tratamiento de la artrosis con factores de crecimiento, pero debemos tener en consideración que no todos los preparados de Plasma Rico en Plaquetas tienen la misma concentración de plaquetas y/o de factores de crecimiento (lo que ponemos de manifiesto en nuestra página “Plasma Rico en Plaquetas (PRP) o Factores de Crecimiento”) lo que puede dificultar la estandarización del tratamiento y la posibilidad de comparación directa de los resultados, y por otra parte no se consiguen los mismos resultados con el tratamiento de Factores de Crecimiento en función del grado de evolución de la artrosis, con lo que la mejor y mayor respuesta positiva se obtiene cuando se tratan artrosis con un grado de desarrollo leve o moderado (por ejemplo en el caso de la artrosis de rodilla los mejores resultados con el tratamiento de factores de crecimiento se obtienen cuando nos encontramos con un grado I-III en la clasificación radiológica propuesta por Kellgren-Lawrence en su artículo «Radiological assessment of osteo-arthrosis«).

La clasificación de la artrosis de rodilla Kellgren-Lawrence se utiliza para evaluar la gravedad de la enfermedad en las radiografías. Esta clasificación tiene cinco categorías:

  • Grado 0: No hay evidencia de artrosis en las radiografías.
  • Grado 1: Pequeñas áreas de desgaste en una o ambas articulaciones de la rodilla.
  • Grado 2: Desgaste moderado en una o ambas articulaciones de la rodilla, con estrechamiento de los espacios articulares.
  • Grado 3: Desgaste avanzado en una o ambas articulaciones de la rodilla, con estrechamiento significativo de los espacios articulares y formación de osteofitos (crecimientos óseos).
  • Grado 4: Desgaste muy avanzado en una o ambas articulaciones de la rodilla, con estrechamiento de los espacios articulares y osteofitos extensos.

La clasificación de Kellgren-Lawrence es utilizada como una herramienta para evaluar la gravedad de la artrosis de rodilla y para guiar el tratamiento y seguimiento del paciente.


El uso de factores de crecimiento empezó a utilizarse en el ámbito de la hematología ya en la década de los 70, mientras que su uso en patología ortopédica o traumatológica comenzó un poco más tarde en la década de los 80 del pasado siglo, con lo que ya llevamos unos cuantos años de uso de los factores de crecimiento en patología principalmente ligada a la artrosis de grandes articulaciones (en relación con patología ortopédica o traumatológica).


El hecho de que llevemos prácticamente 40 años utilizando este tipo de tratamiento de la patología artrósica con un significativo incremento de su utilización en los últimos 20 años, nos permite ir viendo investigaciones ligadas al mecanismo de acción de los factores de crecimiento, así como a los resultados obtenidos en el tratamiento de la artrosis.


El desarrollo e incremento que está teniendo el uso de terapias basadas en el Plasma Rico en Plaquetas o Factores de Crecimiento tienen su base en los siguientes puntos según Andía y Maffulli en su artículo “Platelet-rich plasma for managing pain and inflammation in osteoarthritis”:

  • El tratamiento de la artrosis mediante PRP o Factores de Crecimiento es aceptado en principio tanto por los pacientes como por los profesionales sanitarios, como un tratamiento potencialmente útil en el tratamiento de la artrosis.
  • El Plasma Rico en Plaquetas o Factores de Crecimiento es fácil de utilizar, ya que la preparación del PRP es rápida y técnicamente sencilla; a ello hay que añadir que su administración en la articulación no es muy invasiva (aunque realmente supone realizar una infiltración).
  • El tratamiento con PRP es un tratamiento muy seguro, ya que se utilizan las proteínas del propio paciente y el aumento de concentración de las moléculas bioactivas puede realizarse de forma sencilla y adecuada, evitando así evitar muchos efectos adversos e interacciones farmacológicas.


¿Cómo funciona realmente el Plasma Rico en Plaquetas o Factores de Crecimiento en una Artrosis?


El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) o Plasma Rico en Factores de Crecimiento es una terapia regenerativa que ha ganado popularidad en el tratamiento de diversas patologías, incluyendo la artrosis de rodilla. El PRP se obtiene a partir de la sangre del propio paciente, que se somete a un proceso de centrifugación para separar y concentrar las plaquetas y factores de crecimiento presentes en el plasma sanguíneo.

Las plaquetas en el PRP contienen factores de crecimiento que son liberados en la articulación de la rodilla cuando se inyecta el PRP. Estos factores de crecimiento pueden estimular la proliferación y la diferenciación de las células en el cartílago y otros tejidos articulares, lo que puede mejorar la reparación de los tejidos dañados.

Tras la preparación del Plasma Rico en Plaquetas y su infiltración en la articulación artrósica, van a producirse numerosas interacciones que se van desarrollando a lo largo del tiempo y que suponen la base de la mejora clínica de la artrosis y que podemos clasificar en 3 apartados:

  1. Modificación de la Viscosidad y del Índice de Fricción en la Articulación. El Plasma Rico en Factores de Crecimiento tiene en sí mismo un bajo índice de fricción y si a eso le añadimos las propiedades de estimulación en la formación de Lubricina y de Ácido Hialurónico, tenemos como resultado que el Plasma Rico en Factores de Crecimiento actúa como lubricante y amortiguador en la articulación. Esto puede mejorar la movilidad y reducir el desgaste del cartílago.
  2. Efecto Antiinflamatorio en las diferentes estructuras articulares. El Plasma Rico en Factores de Crecimiento puede ayudar a reducir la inflamación en la articulación de la rodilla al inhibir la liberación de mediadores inflamatorios y regular la respuesta inmunológica. Esto favorece la disminución del dolor y la mejora de la función articular en pacientes con artrosis.
  3. Estimulación de la diferenciación y crecimiento celular o lo que es lo mismo Estimulación de la regeneración del tejido. El PRP contiene factores de crecimiento y proteínas que pueden estimular la reparación y regeneración del tejido dañado, incluyendo el cartílago articular y otros componentes de la articulación. Entre estos factores se encuentran el factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF), factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), factor de crecimiento transformante beta (TGF-β) y factor de crecimiento similar a la insulina (IGF), entre otros.

Modificación de la Viscosidad y del Índice de Fricción en la articulación


El tratamiento con Plasma Rico en Plaquetas puede ayudar a modificar la viscosidad del líquido sinovial, así como a reducir el Índice de Fricción entre las superficies articulares, mejorando con ello la funcionalidad articular. Estas respuestas están ligadas a las propiedades de tipo biofísico y bioquímico del PRP.

La artrosis de rodilla se caracteriza principalmente por el desgaste o pérdida del cartílago articular. El cartílago articular recubre los extremos óseos y se caracteriza porque para su mantenimiento es esencial el líquido sinovial y sus componentes. La lubricación del cartílago juega un papel esencial en el mantenimiento del cartílago y según algunos autores también puede estar involucrada en la progresión de la artrosis.

De los diferentes componentes del líquido sinovial, parece que la Proteína de Zona Superficial (Superficial Zone Protein, SZP), también denominada Lubricina, es un lubricante imprescindible para el cartílago articular y juega un papel importante en la reducción de la fricción y el desgaste y, por lo tanto, es fundamental en la homeostasis del cartílago.

En algunos casos se ha objetivado que en los primeros estadios de la artrosis de rodilla, hay una disminución de las propiedades lubrificantes del líquido sinovial, con una disminución del contenido de Lubricina. Estos cambios traen consigo un mayor Índice de Fricción y con ello un mayor sufrimiento a nivel del cartílago.


Y cómo influye el Plasma Rico en Plaquetas y los Factores de Crecimiento en la Viscosidad e Índice de Fricción?

Podríamos decir que el uso de Plasma Rico en Plaquetas interviene en la mejora de la lubricación del cartílago y en la disminución del Índice de Fricción de 2 formas:


Mediante el propio Plasma Rico en Plaquetas

El Plasma Rico en Plaquetas tiene unas características biofísicas concretas, entre las que podemos destacar su bajo índice de fricción a lo que posiblemente colabora la presencia de Proteína de Zona Superficial (SZP) o Lubricina en su composición. Así, Sakata y col, en el trabajo que dio lugar al artículo “Stimulation of the Superficial Zone Protein and Lubrication in the Articular Cartilage by Human Platelet_rich Plasma” analizan la composición del Plasma Rico en Plaquetas y se encuentran con un resultado inesperado como es la presencia de Lubricina o SZP en una concentración de aproximadamente 3 µg/ml.
En el mismo estudio realizaron un análisis del coeficiente de fricción de diferentes soluciones en condiciones límite en una Interfaz Cartílago-Cristal, cuyos resultados se muestran en el gráfico adjunto. Las Soluciones testadas fueron una Solución Salina, Líquido Sinovial, PRP Np Activado, PRP Activado con Trombina y Hyalurónico de Alto Peso Molecular (Orthovisc). Como se puede apreciar en los resultados, el Indice de Fricción más bajo era el conseguido con líquido sinovial y con las soluciones de Plasma Rico en Plaquetas, mientras que el coeficiente de fricción utilizando Solución Salina o Ácido Hialurónico aumentaba de forma significativa en relación a las otras soluciones.
Estos resultados no hacen sino corroborar que el Plasma Rico en Plaquetas puede disminuir el Índice de Fricción de una articulación artrósica, en la que el líquido sinovial puede no conservar su composición bioquímica normal y con ello sus características biofísicas. Esta disminución del Índice de Fricción tras la infiltración de Plasma Rico en Plaquetas en una rodilla artrósica, podría ser la razón de que algunos pacientes (pocos) tengan una sensación de mejora casi inmediata tras la infiltración de PRP.


Estimulación de la Producción de Lubricina o SZP por el Plasma Rico en Plaquetas

El Plasma Rico en Plaquetas estimula la producción de SZP o Lubricina por parte de los condrocitos superficiales del cartílago así como por los sinoviocitos de la membrana sinovial. La lubricina tiene la función específica de reducir el rozamiento entre las superficies articulares de la rodilla, mediante una reducción de la fricción entre las superficies de la articulación y proporcionando una especie de efecto de «amortiguación» , todo lo cual ayuda a proteger la articulación y a prevenir el desgaste del cartílago articular.

Por tanto el PRP estimula la producción de Lubricina aumentando su concentración y favoreciendo con ello el correcto desempeño de su función protectora y amortiguadora en el líquido sinovial, lo que favorece el correcto mantenimiento del cartílago articular y con ello ayuda a retrasar su deterioro y evolución hacia una artrosis más grave.

La síntesis de Lubricina o Proteína de Zona Superficial (Superficial Zone Protein, SZP) en los tejidos de las articulaciones sinoviales se estimula mediante el tratamiento con plasma rico en plaquetas (PRP) y esta estimulación es muy importante porque se ha demostrado que en la artrosis de rodilla hay una disminución de la cantidad y calidad de la lubricina presente en el líquido sinovial de la articulación. Esto se debe a que las células que producen la lubricina (llamadas células de la superficie articular) se ven afectadas por la degeneración del cartílago articular, lo que provoca una disminución de la producción de lubricina y, por lo tanto, una reducción en su capacidad para proteger y lubricar la articulación.
Sakata y col han realizado un estudio en el que han cultivado células provenientes del cartílago articular y células de la sinovial con PRP y sin PRP durante 3 días y han objetivado que las células derivadas del cartílago articular y de la sinovial cultivadas con Plasma Rico en Plaquetas daban lugar a un aumento muy importante de la síntesis de Lubricina o SZP, en relación a las mismas células cultivadas sin PRP. Los resultados del estudio de Sakata fue publicado en 2015 en la revista The American Journal of Sports Medicine con el título «Stimulation of the Superficial Zone Protein and Lubrication in the Articular Cartilage by Human Platelet-Rich Plasma«


Efecto Antiinflamatorio en las diferentes estructuras articulares


Tal y como comentamos en la entrada del blog «Artrosis o «desgaste» de Rodilla. Tipos, Incidencia, Factores de Riesgo, Síntomas y Tratamiento» el comienzo de la artrosis de rodilla afecta habitualmente al cartílago articular, pero según avanza el proceso artrósico van apareciendo signos inflamatorios que afectan a la membrana sinovial, con lo que el proceso degenerativo inicial se convierte en un proceso inflamatorio global de la articulación, que retroalimenta la artrosis y con ello la destrucción del cartílago.
Por tanto si influimos en el proceso inflamatorio, también estamos incidiendo en la progresión de la artrosis limitando su degeneración y con ello toda la sintomatología asociada, como es el dolor, la rigidez articular, la impotencia funcional,…

La artrosis es una enfermedad degenerativa de las articulaciones en la cual el cartílago articular se desgasta y el hueso subyacente puede experimentar cambios. Estos cambios pueden desencadenar una respuesta inflamatoria en la articulación, lo que contribuye al dolor y la disfunción. El PRP puede tener un efecto antiinflamatorio en una articulación artrósica de varias maneras:

  1. Inhibición de las citoquinas proinflamatorias: El PRP puede reducir la liberación de citoquinas proinflamatorias, como la interleucina-1 beta (IL-1β) y el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α), que están involucradas en la inflamación y el daño del cartílago en la artrosis.
  2. Estimulación de las citoquinas antiinflamatorias: El PRP puede aumentar la producción de citoquinas antiinflamatorias, como la interleucina-4 (IL-4) y la interleucina-10 (IL-10), que ayudan a suprimir la inflamación y proteger el cartílago articular.
  3. Regulación de las metaloproteinasas de matriz (MMP): Las MMP son enzimas que degradan el cartílago articular y están involucradas en la progresión de la artrosis. El PRP puede inhibir la producción de MMP y promover la síntesis de inhibidores de metaloproteinasas de matriz (TIMP), lo que resulta en una menor degradación del cartílago y una disminución de la inflamación.
  4. Efectos sobre las células del sistema inmunológico: El PRP puede modular la actividad de células del sistema inmunológico, como los macrófagos y los linfocitos, lo que podría reducir la inflamación en la articulación artrósica.

Sundman y col han realizado un estudio («The Anti-inflammatory and Matrix Restorative Mechanisms of Platelet-Rich Plasma in Osteoarthritis«) en el que han cultivado de forma conjunta condrocitos y sinoviocitos de una persona con artrosis, con lo que la interacción de ambas fases representan mejor el ambiente articular. El cultivo durante 4 días lo han realizado en un medio estándar (Control) y en un medio estándar con Plasma Rico en Plaquetas (PRP) y han analizado diferentes factores y citokinas, aunque aquí nos vamos a referir a los resultados del análisis del Factor de Necrosis Tumoral (TNFa) y a la exresión génica de la Matriz de Metaloproteinasa 13 (MMP-13).

El Factor de Necrosis Tumoral (TNFa) es un mediador reconocido de la inflamación aguda y está involucrado en la generación del dolor neuropático; en artrosis aumenta sus niveles en el líquido sinovial y se ha correlacionado su concentración con el nivel de dolor del paciente. En este estudio la concentración del Factor de Necrosis Tumoral (TNFa) tras 96 horas de cultivo es significativamente diferente en el Cultivo Control con respecto al Cultivo con PRP; tal y como se aprecia en la parte izquierda del gráfico hay una disminución significativa del marcador inflamatorio como consecuencia del Plasma Rico en Plaquetas.

La Matriz MetaloProteinasa-13 (MMP-13) se ha reconocido como un elemento que interviene en la degradación de la matriz del cartílago durante el desarrollo y evolución de los procesos de artrosis.
Expresión génica de la Matriz MetaloProteinasa-13 (MMP-13) en cultivos de Synoviocitos en una solución Control y en una solución con PRP. Aquí también se aprecia en el lado derecho del gráfico una disminución significativa de los niveles de MMP-13 cuando al cultivo se le añade Plasma Rico en Plaquetas en comparación a una solución Control.

Los autores concluyen que el Plasma Rico en Plaquetas mejoraría el metabolismo y daría lugar a una disminución de marcadores inflamatorios y nociceptivos (en relación con el dolor) en cultivos celulares de condrocitos y sinoviocitos.


Reducción de Biomarcadores Inflamatorios en el líquido sinovial tras infiltraciones de Factores de Crecimiento


Evolución de Biomarcadores Inflamatorios en Artrosis de Rodilla, con tratamiento de Factores de Crecimiento o Acido Hialurónico

Lin y col realizaron un estudio en el que participaron 81 pacientes con artrosis de rodilla de grado II-III en la clasificación de Kellgren-Lawrence según estudio radiográfico y fueron divididos de forma aleatoria en 2 grupos en función del tratamiento que se les iba a realizar. Un grupo formado por 45 personas recibían 3 infiltraciones de factores de crecimiento intra-articular con periodicidad semanal, mientras que el segundo grupo formado por 36 personas recibían 3 infiltraciones de ácido hialurónico de alto peso molecular también con periodicidad semanal.

En todos los pacientes e infiltraciones, previo a la infiltración de los factores de crecimiento o ácido hialurónico se extraían 2-3 ml de líquido sinovial para posterior análisis de diferentes biomarcadores -principalmente relacionados con la inflamación- entre los que se analizaba el Factor de Necrosis Tumoral alfa (TNF-α) y la Interleucina 6 (IL-6).

No debemos olvidar que la inflamación es un componente clave de la artrosis de rodilla, y las citoquinas inflamatorias juegan un papel importante en este proceso. En el estudio de Lin analizaron entre otras, 2 de las citoquinas inflamatorias más significativas que encontramos en una articulación artrósica:

  • Factor de Necrosis Tumoral alfa (TNF-α): Esta citoquina proinflamatoria desempeña un papel importante en la artrosis. TNF-α puede aumentar la producción de otras citoquinas inflamatorias y enzimas que descomponen el cartílago.
  • Interleucina 6 (IL-6): Aunque IL-6 puede tener algunas funciones antiinflamatorias, en general se considera proinflamatoria en el contexto de la artrosis. Puede promover la inflamación y contribuir a la degradación del cartílago.

En la imagen vemos la evolución de los biomarcadores a lo largo del tiempo; los niveles de base se corresponden con la toma de líquido sinovial previo a la primera infiltración, por lo que realmente podemos considerar la situación base de estos pacientes, mientras que 1 Wk y 2 Wk se corresponden con el análisis del líquido sinovial extraído previamente a la segunda y tercera infiltración. Por tanto la evolución se corresponde con el efecto de las 2 primeras semanas de tratamiento.

En cuanto a los resultados del estudio y tal y como podemos observar en los gráficos, hay una reducción significativa de estos marcadores inflamatorios en el líquido sinovial de ambos grupos de tratamiento, siendo significativamente mayor la reducción de dichos marcadores inflamatorios en el grupo que ha sido tratado con Factores de Crecimiento, confirmando de esta forma el efecto antiinflamatorio del tratamiento con Factores de Crecimiento en la Artrosis de Rodilla.

Según los autores del estudio, sus resultados sugieren que el papel principal del PRP puede ser inhibir los factores inflamatorios para que no dañen aún más las articulaciones, promover la reparación de lesiones articulares y estimular la regeneración del cartílago.

El estudio al que nos referimos se ha publicado con el título: Effects of platelet-rich plasma on subchondral bone marrow edema and biomarkers in synovial fluid of knee osteoarthritis


Estimulación de la diferenciación y crecimiento celular


La estimulación de la diferenciación y crecimiento celular ha sido la función más interesante y prometedora del efecto del Plasma Rico en Plaquetas, ya que en teoría ello permite favorecer la regeneración del tejido y ser la base del tratamiento de múltiples patologías degenerativas como puede ser el caso de la Artrosis de Rodilla.

A nivel clínico es difícil evaluar el crecimiento celular como consecuencia del tratamiento con Plasma Rico en Plaquetas, pero a nivel de laboratorio sí que hay estudios que confirman la estimulación del crecimiento y diferenciación celular como consecuencia de los Factores de Crecimiento integrados en el Plasma Rico en Plaquetas.



Diferenciación y Crecimiento de Condrocitos


Krüger y col publican un estudio en la revista Journal of Othopaedic Research con el título «Human Platelet-Rich Plasma Stimulates Migration and Chondrogenic Differentiation of Human Subchondral Progenitor Cells» donde demuestran que el Plasma Rico en Plaquetas (PRP) estimula la migración y la diferenciación condrogénica de las células progenitoras del hueso subcondral. En definitiva, concentraciones concretas de PRP son capaces de estimular la producción de condrocitos en base a las células del hueso subcondral, favoreciendo con ello el mantenimiento del cartílago articular.

En el gráfico obtenido del estudio de Krüger citado, se aprecia el grado de migración celular de las células progenitoras subcondrales en función de la concentración de suero o de PRP en el cultivo utilizado. Se aprecia un aumento significativo del número de células migradas según aumenta la concentración de Plasma Rico en Plaquetas (PRP) hasta una concentración de PRP del 25%, mientras que un aumento mayor de la concentración de PRP disminuye el efecto estimulante y se reduce el número de células migradas.

Por tanto el Plasma Rico en Plaquetas sí que estimula -a nivel de laboratorio al menos- la formación de condrocitos, permitiendo con ello mejorar el contenido y funcionalidad del cartílago articular.



Diferenciación y Crecimiento de Tenocitos


La estimulación del crecimiento celular gracias al Plasma Rico en Plaquetas, no se limita a los condrocitos del cartílago articular, sino que también son estimuladas otras líneas celulares como son los tenocitos.

Jo y col consideran que el plasma rico en plaquetas estimula la proliferación celular y mejora la expresión y síntesis de genes de la matriz en tenocitos aislados de tendones humanos del manguito rotador con desgarros degenerativos y realizan un este estudio con el objeto de determinar los efectos del gel PRP en la proliferación, la expresión de genes de la matriz, el glicosaminoglicano (GAG) y la síntesis total de colágeno de los tenocitos de tendones humanos del manguito de los rotadores con desgarros degenerativos.

Crecimiento y Proliferación de Tenocitos Humanos gracias al efecto de los Factores de Crecimiento integrados en el Plasma Rico en Plaquetas

En la imagen superior se aprecia que la proliferación de tenocitos humanos aumenta según aumenta la concentración de Plasma Rico en Plaquetas, hasta alcanzar un máximo con una concentración de plaquetas de aproximadamente 4000 células/ml. También se visualiza en los 2 primeros cuadros que el uso de FBS (Suero Fetal Bovino) y PPP (Plasma pobre en Plaquetas), no tienen prácticamente ninguna influencia sobre el crecimiento de tenocitos.
Imagen del artículo de Jo y col, «Platelet-Rich Plasma Stimulates Cell Proliferation and Enhances Matrix Gene Expression and Synthesis in Tenocytes From Human Rotator Cuff Tendons With Degenerative Tears» publicado en la revista The American Journal of Sports Medicine, 2012.

Los autores de este estudio concluyen que el Plasma Rico en Plaquetas promueve la proliferación de tenocitos de tendones humanos del manguito de rotadores con desgarros degenerativos y que mejora la expresión génica y la síntesis de la matriz tendinosa.
Los resultados de este estudio indican que el PRP podría ofrecer una estrategia biológica útil para promover la regeneración de los desgarros del manguito de los rotadores.



Tiempo de Respuesta de los Factores de Crecimiento


El efecto del tratamiento con Factores de Crecimiento en la Artrosis de Rodilla puede comenzar rápidamente en algunos pocos casos (como hemos comentado anteriormente, los cambios de viscosidad y rozamiento que puede traer consigo la infiltración de factores de crecimiento da lugar a que en un porcentaje muy pequeño de casos la mejoría tras la infiltración sea casi inmediata) pero en la mayoría se precisa un tiempo relativamente largo para que puedan completarse los procesos regenerativos ligados a este tratamiento.


El tiempo que se tarda en notar los efectos del tratamiento con PRP o Factores de Crecimiento puede variar considerablemente de una persona a otra y depende de varios factores, como el grado de evolución o gravedad de la artrosis, la composición de la sangre (principalmente en cuanto a concentración de plaquetas), la salud general del paciente y las expectativas individuales del tratamiento. Algunos pacientes pueden comenzar a notar una mejora en sus síntomas dentro de unas pocas semanas después del tratamiento (principalmente por el efecto antiinflamatorio del tratamiento con factores de crecimiento), mientras que otros pueden necesitar varios meses para ver un cambio significativo.


Como puede apreciarse en el gráfico inferior, tomado del Capítulo V (Platelet-Rich Plasma, de los autores Yuan & Gellhorn) del libro Regenerative Medicine for Spine and Joint Pain publicado por Springer en 2020, el proceso de las diferentes fases se alarga hasta los 2-3 meses después de completado el tratamiento, que teniendo en cuenta que habitualmente se compone de 3 infiltraciones (con periodicidad habitualmente semanal o quincenal), vamos a necesitar esperar prácticamente 4 meses desde el comienzo del tratamiento con factores de crecimiento para evaluar realmente sus efectos.


Las tres fases superpuestas de la cicatrización de heridas: inflamación, proliferación y remodelación. Tras la lesión tisular, se produce la adhesión, agregación y activación plaquetaria, junto con el inicio de la cascada inflamatoria, que tiene lugar durante los primeros días de la cicatrización. A continuación se produce la fase de proliferación celular y síntesis tisular, que consiste en la angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos bajo el estímulo de uno de los factores de crecimiento presente en el Plasma Rico en Plaquetas como es el VEGF, Vascular Endothelial Growth Factor), deposición de colágeno, formación de tejido de granulación, epitelización y contracción de la herida. Por último, la fase de remodelación tisular se produce entre semanas y meses después de la lesión y consiste en la maduración del colágeno y la matriz extracelular.



Evolución de la Artrosis de Rodilla con el tratamiento de Factores de Crecimiento, en función de su Grado Evolutivo


La evolución de la artrosis de rodilla con el tratamiento de factores de crecimiento puede variar según el grado evolutivo de la enfermedad al inicio del tratamiento. Aquí hay una visión general basada en etapas hipotéticas:

  1. Grados Iniciales (Grado I-II): En las etapas tempranas, la artrosis se caracteriza por un leve desgaste del cartílago. El tratamiento con factores de crecimiento podría ser más efectivo en estas etapas, potencialmente ayudando a reparar el cartílago y a reducir la inflamación.
  2. Grados Moderados (Grado II-III): Con un desgaste más significativo del cartílago y posiblemente cambios óseos, el tratamiento con factores de crecimiento en esta etapa trae consigo principalmente una reducción del dolor, una mejora de la funcionalidad y una reducción de la progresión de la enfermedad. Los factores de crecimiento pueden contribuir a la reparación del tejido, pero es posible que no reviertan completamente los daños existentes.
  3. Grados Avanzados (Grado IV): En las etapas avanzadas, donde hay un desgaste considerable del cartílago y cambios óseos importantes, el tratamiento con factores de crecimiento podría tener un impacto limitado. El enfoque puede estar más en manejar el dolor y mantener la movilidad tanto como sea posible.

Es importante destacar que la eficacia del tratamiento con factores de crecimiento puede variar según el individuo y otros factores como la edad, el estado general de salud, y el estilo de vida.





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